Page 433 - El ingenioso caso de don Quijote de la Mancha
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repararé en tanto más cuanto, sino que luego me desistiré de todo, y me gozaré mi renta como un
duque, y allá se lo hayan.
-Eso, hermano Sancho -dijo el canónigo-, entiéndase en cuanto al gozar la renta; empero al
administrar justicia, ha de atender el señor del estado, y aquí entra la habilidad y buen juicio, y
principalmente la buena intención de acertar; que si ésta falta en los principios, siempre irán
errados los medios y los fines, y así suele Dios ayudar al buen deseo del simple como desfavorecer al
malo del discreto.
-No sé esas filosofías -respondió Sancho Panza-; mas sólo sé que tan presto tuviese yo el condado
como sabría regirle; que tanta alma tengo yo como otro, y tanto cuerno como el que más, y tan rey
seria yo de mi estado como cada uno del suyo; y siéndolo, haría lo que quisiese, y haciendo lo que
quisiese, haría mi gusto; y haciendo mi gusto, estaría contento; y en estando uno contento, no tiene
más que desear; y no teniendo más que desear, acabóse, y el estado venga, y a Dios y veámonos,
como dijo un ciego a otro.
-No son malas filosofías ésas, como tú dices, Sancho; pero, con todo eso, hay mucho que decir sobre
esta materia de condados.
A lo cual replicó don Quijote:
-Yo no sé que haya más que decir; sólo me guío por el ejemplo que me da el grande Amadís de
Gaula, que hizo a su escudero conde de la ínsula Firme; y así, puedo yo sin escrúpulo de conciencia
hacer conde a Sancho Panza, que es uno de los mejores escuderos que caballero andante ha tenido.
Admirado quedó el canónigo de los concertados disparates que don Quijote había dicho, del modo
con que había pintado la aventura del Caballero del Lago, de la impresión que en él habían hecho las
pensadas mentiras de los libros que había
leído, y finalmente, le admiraba la necedad de Sancho, que con tanto ahínco deseaba alcanzar el
condado que su amo le había prometido. Ya en esto volvían los criados del canónigo, que a la venta
habían ido por la acémila del repuesto, y haciendo mesa de una alhombra y de la verde yerba del
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