Page 60 - Historia de una gaviota y del gato que le enseño a volar - 6° - Septiembre
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La elección del humano
No fue fácil decidir con qué humano maullaría Zorbas. Los gatos
hicieron una lista de todos los que conocían, y fueron descartándolos
uno tras otro.
—René, el chef de cocina, es sin duda un humano justo y
bondadoso. Siempre nos reserva una porción de sus especialidades,
las que Secretario y yo devoramos con placer. Pero el buen René sólo
entiende de especias y peroles, y no nos sería de gran ayuda en este
caso —afirmó Colonello.
—Harry también es buena persona. Comprensivo y amable con
todo el mundo, incluso con Matías, al que disculpa tropelías terribles,
¡terribles!, como bañarse en pachulí, ese perfume que huele terrible,
¡terrible! Además Harry sabe mucho de mar y navegación, pero de
vuelo creo que no tiene la menor idea —comentó Sabelotodo.
—Carlo, el jefe de mozos del restaurante, asegura que le
pertenezco y yo dejo que lo crea porque es un buen tipo.
Lamentablemente, él entiende de fútbol, baloncesto, voleibol,
carreras de caballos, boxeo y muchos deportes más, pero jamás le he
oído hablar de vuelo —informó Secretario.
—¡Por los rizos de la anémona! Mi capitán es un humano
dulcísimo, tanto que en su última pelea en un bar de Amberes se
enfrentó a doce tipos que lo ofendieron y sólo dejó fuera de combate
a la mitad. Además, siente vértigo hasta cuando se sube a una silla.
¡Por los tentáculos del pulpo! No creo que nos sirva —decidió
Barlovento.
—El niño de mi casa me entendería. Pero está de vacaciones, ¿y
qué puede saber un niño de volar? —maulló Zorbas.
—Porca miseria! se nos acabó la lista —rezongó Colonello.
—No. Hay un humano que no está en la lista —indicó Zorbas—. El
que vive donde Bubulina.
Bubulina era una bonita gata blanquinegra que pasaba largas
horas entre las macetas de flores de una terraza. Todos los gatos del
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