Page 216 - Hamlet
P. 216
bien serio y taciturno. Vamos, amigo, que es menester sacaros de aquí y acabar con ello.
Buenas noches, madre.
Acto IV
Escena I
CLAUDIO, GERTRUDIS, RICARDO, GUILLERMO
Salón de Palacio.
CLAUDIO.- Esos suspiros, esos profundos sollozos, alguna causa tienen, dime cuál es;
conviene que la sepa yo... ¿En dónde está tu hijo?
GERTRUDIS.- Dejadnos solos un instante. ¡Ah! ¡Señor lo que he visto esta noche!
CLAUDIO.- ¿Qué ha sido, Gertrudis? ¿Qué hace Hamlet?
GERTRUDIS.- Furioso está, como el mar y el viento cuando disputan entre sí cuál es
más fuerte. Turbado con la demencia que le agita, oyó algún ruido detrás del tapiz; saca la
espada, grita: un ratón, un ratón, y en su ilusión frenética mató al buen anciano que se
hallaba oculto.
CLAUDIO.- ¡Funesto accidente! Lo mismo hubiera hecho conmigo si hubiera estado
allí. Ese desenfreno insolente amenaza a todos: a mí, a ti misma, a todos en fin. ¡Oh! ¿Y
cómo disculparemos una acción tan sangrienta? Nos la imputarán sin duda a nosotros,
porque nuestra autoridad debería haber reprimido a ese joven loco, poniéndole en paraje
donde a nadie pudiera ofender. Pero el excesivo amor que le tenemos nos ha impedido