Page 221 - Hamlet
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HAMLET.- Nada más que manifestar, cómo un Rey puede pasar progresivamente a las
                  tripas de un mendigo.

                       CLAUDIO.- ¿En dónde está Polonio?

                       HAMLET.- En el cielo. Enviad a alguno que lo vea, y si vuestro comisionado no le
                  encuentra allí, entonces podéis vos mismo irle a buscar a otra parte. Bien que, si no le
                  halláis en todo este mes, le oleréis sin duda al subir los escalones de la galería.

                       CLAUDIO.- Id allá a buscarle.

                       HAMLET.- No, él no se moverá de allí hasta que vayan por él.

                       CLAUDIO.- Este suceso, Hamlet, exige que atiendas a tu propia seguridad, la cual me
                  interesa tanto, como lo demuestra el sentimiento que me causa la acción que has hecho.
                  Conviene que salgas de aquí con acelerada diligencia. Prepárate, pues. La nave está ya
                  prevenida, el viento es favorable, los compañeros aguardan, y todo está pronto para tu viaje
                  a Inglaterra.

                       HAMLET.- ¿A Inglaterra?

                       CLAUDIO.- Sí, Hamlet.

                       HAMLET.- Muy bien.

                       CLAUDIO.- Sí, muy bien debe parecerte, si has comprendido el fin a que se encaminan
                  mis deseos.

                       CLAUDIO.- Yo veo un ángel que los ve... Pero vamos a Inglaterra. ¡Adiós, mi querida
                  madre!

                       CLAUDIO.- ¿Y tu madre que te ama, Hamlet?

                       HAMLET.- Mi madre... Padre y madre son marido y mujer; marido y mujer son una
                  carne misma, conque... Mi madre... ¡Eh, vamos a Inglaterra!






                  Escena VII




                  CLAUDIO, RICARDO, GUILLERMO
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