Page 58 - El vampiro vegetariano
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                                                                                  mente-. Vamos al parque.

                                                                                       Había  un  pequeño  parque  cerca,  que  la  niña
                                                                                       cruzaba iodos los días al ir y venir del colegio, y

                                                                                       hacia allí se dirigieron.
                                                                                  ■     —Voy a llegar tarde  -comentó Tomás, aunque
                                                                                  sin excesiva preocupación-. Y tú más.
                         ESPIERTA, dormilona, que vas a llegar                         —-Vamos a hacer novillos.

               tarde al colé!                                                          -—{No me lo puedo creer! -exclamó el  niño-. ¡La
                  Lucía  no  llevaba  ni  un  par  de  horas  dormida                      superempollona haciendo novillos!  —Es una

               cuando sp madre, sacudiéndola suave- menté, la                                                emergencia -se justificó Lucía.
               despertó.                                                               Al poco rato llegaron al parque. Se sentaron en

                  El  Cansancio  y  las  emociones  de  la  noche                      un  banco,  cerca  de  un  estanque  con  patos,  y
               anterior  la  habían  dejado  agotada,  y  tuvo  que                    Tomás preguntó:

               hacer  un  esfuerzo  sobrehumano  para  levantarse                      |¡' —¿Tiene que ver con... quien tú ya sabes?
               de la cama. Se lavó y desayunó a toda prisa, pero                       —Sí -contestó la niña muy seria-. Tenías I razón:
               al llegar a la portería decidió esperar a Tomás. Lo                el señor Lucarda es un vampiro.

               que había ocurrido era demasiado importante, y                          —¿Cómo  estás  tan  segura?  ¿No  te  habrá

               tenía que contárselo enseguida.                                    atacado? Ahora que me fijo, estás muy pálida...
               Tomás no iba al mismo colegio que ella, y entraba                       Lucía  le  contó  su  extraordinaria  aventura  B:
                un poco más tarde, por lo que no solían coincidir                 nocturna,  y  luego  le  enseñó  la  carta  de  Camila.

            por las mañanas. Cuando el niño bajó, se sorprendió                   Cuando  terminó  de  leerla,  Tomás  estaba  tem-
                                     al ver a su amiga esmerándolo.               blando.

                  —¡Lucía! ¿Qué haces tú aquí a estas horas?                           —¿Qué  hacemos  ahora?  -preguntó  con  expres
                                                                                  ion de terror.


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