Page 199 - Hamlet
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se moderan los ímpetus violentos,
                   con ellos se disipan las ideas
                   a que dieron lugar, y el más ligero
                   acaso, los placeres en afanes
                   muda tal vez, y en risa los lamentos.
                   Amor, como la suerte, es inconstante:
                   que en este mundo al fin nada hay eterno,
                   y aun se ignora si él manda a la fortuna
                   o si ésta del amor cede del imperio.
                   Si el poderoso del lugar sublime
                   se precipita, le abandonan luego
                   cuantos gozaron su favor; si el pobre
                   sube a prosperidad, los que le fueron
                   más enemigos su amistad procuran
                   (y el amor sigue a la fortuna en esto)
                   que nunca al venturoso amigos faltan,
                   ni al pobre desengaños y desprecios.
                   Por diferente senda se encaminan
                   los destinos del hombre y sus afectos,
                   y sólo en él la voluntad es libre;
                   mas no la ejecución, y así el suceso
                   nuestros designios todos desvanece.
                   Tú me prometes no rendir a nuevo
                   yugo tu libertad... Esas ideas,
                   ¡ay!, morirán cuando me vieres muerto.
                       CÓMICO 2.º.-  Luces me niegue el sol, frutos la tierra,
                   sin descanso y placer viva muriendo,
                   desesperada y en prisión oscura
                   su mesa envidie al eremita austero;
                   cuantas penas el ánimo entristecen,
                   todas turben al fin de mis deseos
                   y los destruyan, ni quietud encuentre
                   en parte alguna con afán eterno;
                   si ya difunto mi primer esposo,
                   segundas bodas pérfida celebro.

                       HAMLET.- Si ella no cumpliese lo que promete...

                       CÓMICO 1.º.-  Mucho juraste. Aquí gozar quisiera
                   solitaria quietud, rendido siento
                   al cansancio mi espíritu. Permite
                   que alguna parte le conceda al sueño
                   de las molestas horas.
                       CÓMICO 2.º.-     Él te halague
                   con tranquilo descanso y nunca el Cielo
                   en unión tan feliz pesares mezcle.
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