Page 30 - Hamlet
P. 30
HORACIO.- Creedme, no le sigáis.
HAMLET.- Mis hados me conducen y prestan a la menor fibra de mi cuerpo la nerviosa
robustez del león de Nemea. Aún me llama... Señores, apartad esas manos... Por Dios..., o
quedará muerto a las mías el que me detenga. Otra vez te digo que andes, que voy a
seguirte.
Escena XI
HORACIO, MARCELO
HORACIO.- Su exaltada imaginación le arrebata.
MARCELO.- Sigámosle, que en esto no debemos obedecerle.
HORACIO.- Sí, vamos detrás de él... ¿Cuál será el fin de este suceso?
MARCELO.- Algún grave mal se oculta en Dinamarca.
HORACIO.- Los Cielos dirigirán el éxito.
MARCELO.- Vamos, sigámosle.
Escena XII