Page 53 - ¡Ay, cuánto me quiero!
P. 53

Para   que   sean   unos   por  el  jardín.  Después  de  todo

 monstruos  expertos,  esa  niña   ese  ejercicio,  deben  haber  que­

 les  enseñó  a  darse  vueltas  de   dado  muy  cansados.  Nosotros

 carnero, los hizo hacer una ron­  también de tanto jugar.

 da y más tarde los puso a correr  — Buenas noches — me dijo.



 56                               57
   48   49   50   51   52   53   54   55   56   57   58