Page 44 - La Casa de Bernarda Alba
P. 44
FEDERICO GARCÍA LORCA
AMELIA: ¡A mí me da vergüenza de estas cosas!
ANGUSTIAS: Y a mí, pero hay que pasarlas.
LA PoNCIA: ¿ Y habló más?
ANGUSTIAS: Sí, siempre habló él.
MARTIRIO: ¿Y tú?
ANGUSTIAS: Y o no hubiera podido. Casi se me salía el corazón por la
boca. Era la primera vez que estaba sola de noche con un hombre.
MAGDALENA: Y un hombre tan guapo.
ANGUSTIAS: No tiene mal tipo.
LA PoNCIA: Esas cosas pasan entre personas ya un poco instruidas,
que hablan y dicen y mueven la mano ... La primera vez que mi
marido Evaristo el Colín vino a mi ventana ... Ja, ja, ja.
AMELIA: ¿Qué pasó?
LA PoNCIA: Era muy oscuro. Lo vi acercarse y al llegar me• dijo,
buenas noches. Buenas noches, le dije yo, y nos quedamos callados
más de media hora. Me corría el sudor por todo el cuerpo. Entonces
Evaristo se acercó, se acercó, que se quería meter por los hierros y
dijo con voz muy baja: ¡ven que te tiente! (Ríen todas). (Amelia se
levanta corriendo y espía por una puerta) .
AMELIA: ¡Ay! Creí que llegaba nuestra madre.
MAGDALENA: ¡Buenas nos hubiera puesto! (Siguen riendo).