Page 87 - Julito Cabello, los zombis enamorados
P. 87

a "encuevarse". Les juro que la vi más pá­
 lida. Es que ya ni hace la fotosíntesis.
 Mientras recordaba esto y lo que había
 sido mi día (música de fondo, por favor),
 no sabía en qué pensar.
 Fue un día muy raro.
 Partió como  el  amanecer de  los  zom­
 84
 bis, siguió como el atardecer de los zombis
 y termina en la noche de los zombis.  La   Un día floral
 trilogía compl ta en un solo día.
 E:
 Además que esa mañana había desper­
 tado como un niño sin compromiso emo­
 cional y ahora hasta tenía que preparar­
 me para un baile. ¿Cómo hay que vestirse
 para esa cosa?¿Hay que bañarse y peinarse
 también?¿Hay que bailar, además?
 Bueno.  Resistiré,  como  dice una can­  Si mi mamá estuviera en funciones
 ción que mi papá canta en la ducha.   (de mamá),  seguro que no habría pasado
 Y lo otro que no entiendo mucho, to­  lo que pasó. Pero como fue temprano (an­
 davía, es que la Andrea me haya invitado.   tes de su aparición diaria de las 8 A.M.),
 Y con lo plomo que fui con ella.   In que pasó, pasó.
 ¿ Le gustaré?   Cuando  entré  a  la  cocina,  la  Cleme
 ¿Tan irresistible soy?   seguía  con  los  ojos  románticos  (miraba
 Zzzzzz.   para arriba) y mi papá, que estaba toman­
 ¿ Zoy tan irreziztible?   do una agüita de hierbas, no se veía de lo
 z.   mejor (miraba para abajo).

        -Papá,  ¿te  cayó  muy  mal  la  comida
     mexicana?
        -Creo que abusaron de mi nobleza.
   82   83   84   85   86   87   88   89   90   91   92