Page 70 - Julito Cabello, los zombis enamorados

- T an fino, Sepúlveda. No. Viene lle­ -Por eso mismo, por bobo,
gando de Argentina junto a su familia. (¿bobo?, ¿pavo? voy a llamar al teléfo­
A su mamá la trasladaron por su trabajo, no de denuncia de maltrato infantil).
de vuelta a Chile. ¿Por qué mejor no les -Muy bien, miss, sho (oh, no) me en­
cuentas tú, Andrea? cargo.
-Bueno, sho ... Y así fue. Le hice un recorrido expedito
Y ahí nos empezamos a reír. por San Expedito. Ni sho hablé mucho,
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Qué maldad. ni ella tampoco. Al final la dejé en el kios­
Y todo porque sonaba a argentina. ko del Moncho y misión cumplida, me
-No te preocupes, Andrea. Espere- dije. Pero no.
mos a que los burros paren de rebuznar, -¿Puedes, por favor, llevarme a la bi­
DE INMEDIATO, y tú sigues. hlioteca, che?
Cric cric. Silencio exprés. Con miss -Ah, hum, a ver si me acuerdo dónde
Coddou NO se juega. está ...
Y así fue como Andrea pudo contar­ Y sí, me acordé. Allí la dejé.
nos algunas cosas de su vida, pero no me
acuerdo mucho (nada, la verdad) porque
en esos días Aarón todavía existía y está­
bamos jugando combate naval.
Y justo le disparé al E 8 y fue tocado y
hundido. Seco.
Cuando íbamos saliendo a recreo, miss
Coddou me llamó.
-Julito.
-Para servirle, miss Coddou.
-No te hagas el chistosito. Quiero
que, por favor, le hagas un recorrido a An­
drea por el colegio para que se ubique.
-¿Por qué sho? (ups, se me salió).