Page 91 - El Superzorro
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 -¡No  estás  soñando,  mamá!   quete de rechuparse los dedos! -ex­

 ¡Tócalas,  y  verás  como  son  de  ver­  clamó la zorra, mientras su hijo co­
 dad! ¡Nos hemos salvado, mamá, nos   menzaba a desplumar las gallinas. Y

 hemos salvado!   añadió llena de orgullo-:  ¡Por algo
 Esta  vez  la  zorra  dio  un  res­  llaman a tu padre el superzorro!
 pingo  y abrazó a  su hijo,  sin poder   Mientras  tanto,  en  el  fondo

 creer lo que veía:   del túnel,  superzorro seguía hacien­
 -No  es  posible,  no  es  posi­  do de las suyas:
 ble...  -murmuraba,  restregándose   -¡Ánimo,  muchachos! -de­

 los ojos-,  pero si éstas parecen las   cía sin dejar de cavar-, que ya esta­
 gallinas del mismísimo granjero ...   mos llegando ...
 -¡Bufón! -le cortó triunfan­  -¿Adónde?  -preguntó  un

 te su hijo-. ¡Y lo son, mamá, y lo son!   zornto.
 Y en cuatro palabras le contó   -¡Ah! Ése es otro secreto ...
 a su madre la aventura del túnel, los

 tablones  de  madera  y  cómo  se  ha­
 bían colado  en  el  supergallinero  de
 Bufón.

 El olor de las gallinas parecía
 haber reanimado a la hambrienta zo­
 rra:

 -¡Les voy a preparar un ban-
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