Page 61 - Amigo se escribe con H (2)

y me hizo señas para Subimos las gradas y nos dirigimos hacia una puerta cerrada. H tocó muy suavecito y, sin esperar contestación, abrió la puerta y entró. Detrás de él En la habitación, sentada frente a la ventana, estaba una mujer muy delgada de cabello blanco y manos arrugadísimas. —Hola, abuela, ¿cómo estás? La mujer volteó, sonrió, abrió sus brazos y —Nicanor, hijito, qué alegría me da verte. H se acercó, le dio un beso en la mejill
había llegado. Cuando nos levantamos de la

hora no mesa, le dije: —¿A quién querías presentarme? —Ven conmigo —dijo H, que lo siguiera. pasé yo. —dijo H. contestó: continuó: para que te conozca. entonces:

este incidente, H me invitó a almorzar a su casa. No
Días después, cuando casi habíamos olvidado
este gesto: en múltiples oportunidades yo había comido en su casa y él en la —Hay alguien a quien te quiero presentar —me —¿A quién? —le pregunté—. ¿Tienes algún Aquella tarde fui a su casa; la mamá de H tenía listo el almuerzo para los dos. En ningún momento vi a nadie ajeno a la familia. Pensé entonces que quizá esperaban a un invitado que a última

La verdad había nada de extraño en mía. dijo emocionado. primo guapo de 12 años en adelante? —Nada de eso, Ant, es una sorpresa.