Page 83 - El Superzorro
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 largo,  largo  rato.  ¿Cuánto?  Ni  ellos   -Pues significa que  estamos
 mismos lo sabían. Perdidos en la os­  justamente  debajo  de  la  casa  de  al­

 curidad del túnel  no  tenían  noción   gún  fulano.  Ahora  sólo  falta  averi­
 del tiempo, no distinguían el día de   guar  si  ese  fulano  es  el  que  yo  me
                  .
            .
 la  noche...  Pero,  al  fin,  don  Zorro   1mag1no.
 dio la orden de alto.   Al  quebrarse,  el  tablón  hizo
 -Me parece -dijo- que ha  un  ruido  espantoso  y  los  zorros  se

 llegado la  hora  de  echar  un  vistazo   metieron de nuevo en el túnel,  cre­
 para ver dónde estamos. Salgamos a   yendo haber sido descubiertos. Pero
 la superficie y pronto veremos si he­  nada ocurrió. Así es que don Zorro,

 mos acertado.   envalentonado,  metió la cabeza  por
 Lentamente,  con mucha cau­  el agujero para echar un vistazo. No
 tela, los zorros fueron abriendo túnel   pudo contener un grito de alegría.

 hacia arriba. Subían y subían,  hasta   -¡Yupiii!  ¡Esto es fantástico!
 que de pronto ... sus cabezas tropeza­  ¡Esto es maravilloso! -gritaba el zo­
 ron  con algo duro,  que les impedía   rro, fuera de sí-. Lo logramos ... ¡y a

 seguir. No tardó  mucho  don  Zorro   la  primera!  ¡Suban,  suban,  hijos
 en comprobar de qué se trataba:   míos, y verán un espectáculo que ha­
 -¡Ahahá! -exclamó-.  Tal   ría las delicias de cualquier zorro tan

 como suponía. Son tablones de ma­  hambriento ... como nosotros!
 dera.              Los zorritos subieron como el
 -¿ Y eso qué significa, papá?  rayo  y  al  llegar  arriba  presenciaron
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