Page 120 - El Superzorro
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            -dijo el tejón con tristeza.                                         nozco!  Pero  ya está bien  de alabar­
                    -Nosotros,  en  cambio,  no                                 nos ... ¡a trabajar se ha dicho!

            queremos matarlos a ellos ...                                                Pocos minutos después, la pa­
                     -¡Dios nos libre!  -exclamó                                ta del tejón tropezaba con un objeto

            el buen tejón.                                                      duro y contundente:
                     -Sólo pretendemos -conti- ·                                         -Y esto ¿qué puede ser?  Pa­
            nuó  el  zorro- sustraerles  un  poco                               rece una tapia -dijo, mientras qui­

            de  comida para  alimentarnos  noso­                                taba  la  arena  del  tapial.  Porque  se
            tros  y  nuestras  familias ...  ¿Qué  hay                          trataba, efectivamente, de una pared,
            de malo en ello?                                                    pero  no  de  piedra  sino  de ladrillo.

                     -Supongo que nada -mur-                                    De cualquier forma, la pared les obs­
            muró el tejón.                                                      truía el paso, y no podían seguir.
                     -¡Son  ellos  los  que  nos  ha-                                    -No  comprendo  -decía  el

            cen la guerra! -exclamó el zorro-.                                  tejón-; ¿a quién se le puede ocurrir
            ¡Nosotros somos animales pacíficos!                                 hacer una pared bajo tierra?

                     Por fin, el tejón aceptó las ra­                                   -Muy sencillo -le contestó
            zones de don Zorro, y en su cara se                                 el  zorro-.  Se trata  de  una  habita­
            esbozó una amplia sonrisa:                                          ción subterránea ... Y si no me equi­
                     -Sabes,  zorrete  -dijo  por                               voco,  ya sé quién es el dueño de tal

             fin-, ¡eres un tipo grande!                                        habitación ...
                     -Y tú  -le  dijo  el  zorro-,

             ¡eres  la persona más buena que  co-
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