Page 5 - Amigo se escribe con H (2)

no volvía la hablar le vez puede

que aparecía era que elegantes

se puedo cada no profundo hacia mí, o
para derecho duda, grande que que año tras año me lucían

cintas asunto sin Ricitos de Oro. Sobre el niño que no tan fotografía, “especiales” eran sencillamente

El lado izquierdo era Imagino modernas
con cabeza. mi que, trenza la odio Y sigo con más detalles: los zapatos. Esto amerita una explicación horriblemente minuciosa. Siempre escuché a mis padres decir que necesitaba zapatos ortopédicos. Esta palabreja me sonaba a chino, pero creía imaginar que mis pies debían tener algún desperfecto leve que podía ser corregido con Tampoco esto suena grave. Pero debo aclarar espantosos. Todas las niñas usaban zapatos con una mocasines... y yo, la or

atadas a niña lado mi cara. mira un que más

mi porque una de mi a de la las
ratón de C., lazo toda niño cosa por lo menos a mi peinado. los zapatos especiales

de notorio reencarnación encontraba el casi ese otra compraban. que los zapatos correas;

colas escaparan más Claudia se mucho, tapaba que sentir dos

Me refiero a detalles como mi aspecto, mis
terminó por revelarme tristes realidades que creía
de infantes, no pude evitar sentir cierto fastidio
Al mirar mi fotografía de graduación del jardín
con recuerdos de mis primeros años de escuela
fotos escolar para y páginas de fotografías que cosas pasaban
La visita a este álbum me resultó muy ingrata,

y es que no sé por su cabeza cuando me peinó para la ceremonia: dos trenzas caían, una sobre cada hombro, y
Tuve que recurrir al álbum de

intentar ubicar a H. el recorrido por páginas olvidadas. zapatos, mi lonchera. hacia mi madre, remataban en inmensos lazos de cinta roja. Hasta ahí ningún problema, ¿cierto?, pero debo indicar que ja- más me he carac- terizado por tener una abundante cabellera, con lo cual el par de trenzas lu- cían en la fotografía como dos