Page 116 - Amigo se escribe con H (2)
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del parque, miré de frente la imagen de ambos y
                                               y ya la consideraba extraviada. Me senté en la banca
                   No sé si son semanas o meses. La tristeza y la
                       añoranza no cuentan el tiempo con la medida de un
                                           que aparecemos H y yo, hace tiempo que no la veía
                                       puesto, y de él saqué esa arrugada fotografía en la
                               Ayer, en medio de una mañana muy fría, metí
                                   mi mano en el bolsillo del abrigo que llevaba
               y nuevos anturios han nacido en medio del parque.
           muchas hojas de eucalipto han caído sobre la acera
                                                           —Ahora tú, H, dondequiera que estés,
       desde que H se fue,
                                                               prométeme que no te has olvidado de mí.
       Ha pasado algún tiempo
                                                       dije en voz baja:
                           calendario.
                                                          —Pero es que yo también tengo miedo, Borja.
                                                                  me haya   Fin
                                              no tengas miedo a la
                                                              he sumado un miedo más a mi
                                          que de una manera casi mágica él vive en mí. Me
                  similares a los de H; a
                      veces parecería como si hubiera robado sus maneras
              disfruté mucho al repetir la palabra puntal. Cuando
      Me he dado cuenta de que utilizo palabras difíciles
          como las que él utilizaba. Ayer, por ejemplo,
                                  capitales y nombres de ríos... Borja, me encantaría
                                      que H supiera que lo recuerdo con mucha fuerza,
                              descubro revisando libros de Geografía, repitiendo
                          de expresarse. En muchas oportunidades me
                                                                  miedo de que H  —No lo creo, Toni, estoy seguro de que en  alguna palabra, en algún gesto y en muchos   -Nuevamente sentí ese nudo en la garganta que  me atacaba cada vez que hablaba de H. Me levanté  de la acera en la que charlábamos, sacudí el cabello
                  hablo, tengo gestos muy
                                              encantaría gritar: “¡H,  memoria; yo no te he olvidado!”, pero…   —Pero qué...   Desde que H se fue, larga lista: ahora tengo   olvidado.   El Borja sonrió y me dijo:   recuerdos de H, debes estar tú.   del Borja y me despedí.
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