Page 15 - Julito Cabello, los zombis enamorados

Ya sé: me pasé un poco. OK.
En mi vida real y diaria todo se está
poniendo igual que en las películas de
zombis, en las que todos se contagian con
algo raro y después quedan con la cara
torcida, arrastrando las patas y haciendo
ruidos raros. Y en este caso mi gran pro­
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blema es que el primer zombi de todos es
nada menos que mi mejor amigo, Aarón. En mi casa ...
¿Por qué?, ¿por qué él?
Desde que llegó al curso Marilú, una
niña súper rosaua que nunca para de ha­
blar, mi EX mejor amigo no es el mismo
de antes.
Es verdad que el Aarón nunca ha habla­
do mucho y sólo decía "hum", pero ahora
cuando dice "hum" es como si se hubiera odo esto pasa en el colegio (y en mi
comido una cucharada gigante de manjar. nariz). Mi casa sigue siendo menos zombi,
Y lo dice como en pregunta. Ahora hace por suerte. Allí la primavera no cambia
"¿hummmm?", y pone una cara de zombi nada. Para el que no sabe: mi papá, Ju­
cariñosito que ¡no-la-so-por-to! lito padre, sigue yendo todo el tiempo a
Lo odio. Y también odio a la Marilú. Y restaurantes para hacer sus críticas en el
odio a la primavera. Y también odio una diario. Va, come como chancho después
espinilla que me salió en la nariz. les pone nota con tenedores -de uno a
Una espinilla. Lo único que me falta­ siete-. Al último ( que se llama El Erizo
ba. Grrrrr. Chascón) le puso un puro tenedor. Es que
le salió un pelo en la sopa. Y era sopa de
pescado que, OBVIO, no tienen pelos.
¿ Habrá sido un pez-luca?