Page 39 - Amigo se escribe con H (2)

notable contribución de los profesores. H leía. Con
necesariamente correspondía a una diligente y
estoy segura de que todo lo que H sabía no
e Historia, hablo de los otros... de aquellos que habitan en las bibliotecas o Cuando un día me preguntó si yo leía, le si sabes leer, quiero La utilización de ese sueles me resultó —Claro que suelo —le contesté con seguridad, Yo no era una mala alumna, lo justo sería
tiempo a los libros. No me refiero a los libros de la
frecuencia, lo veía entregando buena parte de su
H era uno de esos alumnos que haría sentir
desbrutalizadora en favor de la humanidad; pero
maestro en su tarea

realizado a cualquier escuela, a los de Ciencias en las librerías. contesté con un “por supuesto” que retumbó en toda la escuela. Luego me dijo: —No te he preguntado saber si sueles leer con frecuencia. simpática, era una más de esas palabras extrañas con las que H acostumbraba sorprenderme. para luego retroceder y admitir que leía muy poco casi nada. —No te preocupes, Ant —me dijo relajado — algún día los libros serán tu puntal. decir que

No me atrevo a repetirla... era una palabrota, de
descripción que me dejó más confundida que al
una Cuando le comenté a H sobre esta historia, me Un poco avergonzada, tuve que decirle que no. —Necesito que seas mi puntal en el deber de o El me miro, sonrió y me contestó con un sonoro
Y lo peor de todo es que en aquella oportunidad
que ha pasado páginas y páginas de un diccionario
esas que se escuchan en el estadio o en un insulto
televisión. Es una que hace referencia a... No,
de auto a auto o en algunas películas que pasan por
porque no creo ser la única persona en el mundo
perdón, no me atrevo a repetirla. Sólo lo confieso
llegué hasta la página 684 y me encontré con
en busca de! significado de esa palabrota.

inicio. dijo que alguna vez él también había hecho lo mismo, pero que en el camino se encontró con otras palabras que le parecieron mucho más interesantes- Me repitió términos como púrpura y puntal. —¿Las conoces? —me preguntó. Días más tarde, me acerqué orgullosísima y le dije enfática: Geografía. “acepto”.